El mayor guitarrista que ha dado esta tierra, Carlos Santana, llenó con su “luz” a su público mexicano ávido de música, baile y pasión la noche del domingo en el Palacio de los Deportes como parte de su gira Vive Tu Luz Latinoamerica 2009.
El concierto comenzó alrededor de las 19:20 hrs. con las imágenes que hicieron recordar a los asistentes a aquel joven mexicano que se atrevía a compartir los lamentos, alaridos y tararareos de su guitarra con los grupos experimentales reunidos en Woodstock en 1969, imágenes acompañadas de la primera canción de la noche, "Soul Sacrifice".
Santana, ataviado en una larga camisa negra con una imagen de su “patrona”, la virgen de Guadalupe y un sombrero blanco, nos hizo olvidar el paso del tiempo, ya que resulta impresionante la energía que él, al ritmo de sus dedos danzando sobre una hermosa guitarra verde, y los extraordinarios músicos que lo acompañan son capaces de proyectar; él con sus 61 años y aquellos oscilando entre los 45 y 50 aproximadamente.
Todos ellos, hombres, quienes a la par que su líder en escena parecerían declararse fieles devotos de la luz que sólo se puede probar a los pies de una santa, en los brazos de la madre o en las piernas y pechos de la amante:
“Esta canción se la dedicamos a todas las mujeres, porque si ustedes no están contentas no pasa nada en este mundo”, dijo antes de interpretar "María María".
Entre las canciones más celebradas se encontraron "Black Magic Woman", "Corazón espinado", "Jingo", "Oye como va" y "Smooth".